REVOLUCIÓN CONCIENCIA
REVOLUCIÓN CONCIENCIA
Hagamos
una revolución, un movimiento interno, un enfrentamiento de la conciencia con
nuestros intereses, seamos capaces y audaces para concientizar y encausar una
revolución de las ideas, que se acompañe de justas razones para vivir sin estar
por encima del otro, aquel otro que es parte de nosotros mismos. Que tenga como
lucha nuestros defectos, aquellos que obedecen al desequilibrio de un humanismo
y que ahogan a nuestros mundos en un mismo abismo.
Desterremos
los afanes de poder que se miden de moneda en moneda para hacer una “fortuna”,
que se maldice cuando ni justo, ni resguardado, es el futuro para nuestros
descendientes.
Pensar
en plural antes que pensarme solo, porque solo así podremos mantener la unidad
sin estar tan estrechos. Cuando hay comunidad existe unión; todos los
movimientos revolucionarios han sido capaces de triunfar por consecuencia del
fin compartido.
No
es lucha cuando detrás dé, hay intereses que no se comparten, como tampoco se
le puede sumar a la lucha cuando ajenos son los motivos.
Pero
tampoco esperemos que sea el EZLN, ó MARCOS, o DIOS mismo que haga la revolución
porque muy sensibles son ya las INJUSTICIAS, seamos tú, yo, aquel, todos, los
que iniciemos la revolución, la revolución
de las ideas, aquella que no tiene vigencia, ni ley que le impida hacerla;
es pues hacer humanismo.
No
puedes reclamarle al mundo cuando tú formas al mundo. Con el cambio de las
cosas cambian los individuos.
Se
verdadero maestro, que no instruya pero que sí forme, se medico, que no recete
y sí que diagnostique, se policía, que no muerda pero sí que resguarde, sé para
que “vivas y dejes vivir”.
Por
Dámaso Elio Joachín Nolasco
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